¿En qué países son legales las criptomonedas como Bitcoin y Ethereum?
A medida que crece el boom por las criptomonedas, también aparecen más y más incógnitas. Una de ellas parece clara: ¿son las criptodivisas legales? Aunque la pregunta parece sencilla (ya que solo habría que esperar dos respuestas: sí, o no; lo cierto es que responderla conlleva a incluir algunos términos muy complejos.
En este caso, muchos se preguntan si es legal una moneda que no tiene ningún control por el Estado o por algún banco. Por su novedad, Bitcoin y el resto de criptomonedas conocidas, no tiene una legalidad definida. Para poder hablar de la legalidad de estas monedas, también hay que definir muy bien el concepto de Bitcoin.
El Bitcoin es la primera criptomoneda, es decir, una especie de programa informático que comparte información y la ejecuta. Mediante la utilización de un determinado lenguaje de programación se llevan a cabo reglas para el trabajo interno del programa. Este trabajo se centra en las condiciones, procedimientos y respuestas a las acciones llevadas a cabo por los usuarios.
Por tanto, la regulación del uso de las criptodivisas es uno de los temas de actualidad en el mundo de las finanzas. Dicha regulación depende de las autoridades de cada Estado. Este aspecto, unido a la lentitud de la legislación y al desarrollo de las tecnologías, la falta de información y las diferentes ideologías políticas, hace que sea muy difícil establecer un acuerdo legal sobre el uso de las criptomonedas.
En este aspecto, existe un importante sector económico englobado bajo el concepto Regtech (compuesto por reg = referido a regulación, y tech = referido a tecnología), un ente que regula y mejora los parámetros de cumplimiento normativo en las empresas. Su concepto deriva de la definición FinTech y significa básicamente la tecnología aplicada a resolver los problemas de regulación de la industria financiera. Sin embargo, con las monedas virtuales, no es fácil.
En 2018 se publicó un texto en el que se compartió a nivel mundial qué países reconocían la legalidad de las criptomonedas y cuáles no. En este sentido, dividieron el mundo de las criptodivisas en tres grandes grupos:
- Legal: Aquellos países que las aceptan como bien económico, aunque no como divisa propiamente dicha. Es el caso de la Unión Europea, Canadá, Estados Unidos (aunque aquí entra en juego la regulación de cada Estado), Japón, Australia, Nueva Zelanda, Sudáfrica, Brasil…
- Neutral: Se refiere a los países que no determinan la legalidad de forma tajante. En este caso hay muchas incongruencia y bandazos legislativos. Destacan América Latina, y Rusia, pero también India, Pakistán, Nigeria, Indonesia, Vietnam, Kazajistán….
- Ilegal: son aquellos países que se declararon enemigos cerrados a las criptomonedas por “su poder especulativo, su posible uso fraudulento y por ser una plataforma para atacar la soberanía económica nacional”. Aquí destacan algunos como China, Bangladés, el Magreb y algunos países como México, Ecuador y Bolivia.
En este caso, muchos se preguntan si es legal una moneda que no tiene ningún control por el Estado o por algún banco. Por su novedad, Bitcoin y el resto de criptomonedas conocidas, no tiene una legalidad definida. Para poder hablar de la legalidad de estas monedas, también hay que definir muy bien el concepto de Bitcoin.
El Bitcoin es la primera criptomoneda, es decir, una especie de programa informático que comparte información y la ejecuta. Mediante la utilización de un determinado lenguaje de programación se llevan a cabo reglas para el trabajo interno del programa. Este trabajo se centra en las condiciones, procedimientos y respuestas a las acciones llevadas a cabo por los usuarios.
Por tanto, la regulación del uso de las criptodivisas es uno de los temas de actualidad en el mundo de las finanzas. Dicha regulación depende de las autoridades de cada Estado. Este aspecto, unido a la lentitud de la legislación y al desarrollo de las tecnologías, la falta de información y las diferentes ideologías políticas, hace que sea muy difícil establecer un acuerdo legal sobre el uso de las criptomonedas.
En este aspecto, existe un importante sector económico englobado bajo el concepto Regtech (compuesto por reg = referido a regulación, y tech = referido a tecnología), un ente que regula y mejora los parámetros de cumplimiento normativo en las empresas. Su concepto deriva de la definición FinTech y significa básicamente la tecnología aplicada a resolver los problemas de regulación de la industria financiera. Sin embargo, con las monedas virtuales, no es fácil.
En 2018 se publicó un texto en el que se compartió a nivel mundial qué países reconocían la legalidad de las criptomonedas y cuáles no. En este sentido, dividieron el mundo de las criptodivisas en tres grandes grupos:
- Legal: Aquellos países que las aceptan como bien económico, aunque no como divisa propiamente dicha. Es el caso de la Unión Europea, Canadá, Estados Unidos (aunque aquí entra en juego la regulación de cada Estado), Japón, Australia, Nueva Zelanda, Sudáfrica, Brasil…
- Neutral: Se refiere a los países que no determinan la legalidad de forma tajante. En este caso hay muchas incongruencia y bandazos legislativos. Destacan América Latina, y Rusia, pero también India, Pakistán, Nigeria, Indonesia, Vietnam, Kazajistán….
- Ilegal: son aquellos países que se declararon enemigos cerrados a las criptomonedas por “su poder especulativo, su posible uso fraudulento y por ser una plataforma para atacar la soberanía económica nacional”. Aquí destacan algunos como China, Bangladés, el Magreb y algunos países como México, Ecuador y Bolivia.
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