Se puede comprar una casa a 30 años con una hipoteca de criptomonedas. (Foto: Envato)

Pagar la hipoteca con criptomonedas comienza a ser posible

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Las criptomonedas están cada vez más integradas en nuestra vida. Algunas aplicaciones como PayPal ya empiezan a incluir mejoras como la posibilidad de hacer transferencias de esta moneda virtual o ahora también es posible tener una hipoteca en criptomonedas.

Esto es una realidad en Miami. En Estados Unidos se puede comprar una casa a 30 años con una hipoteca de criptomonedas. La empresa que hace esto posible es Milo, que lleva ofreciendo hipotecas en criptomonedas desde finales del año pasado.

Los interesados en este tipo de hipotecas son muchos y concretamente ya hay una lista de espera de 6.000 personas que quieren una propiedad hipotecada en bitcoin y que el pago que realicen cada mes sea con esta moneda virtual.

El fundador de Milo, Josip Rupena, explicó que desde la empresa se dieron cuenta de que muchos de sus clientes tenían un “interesante patrimonio en criptomonedas” y que a la hora de pedir un préstamo para una hipoteca convencional se les hacía más complicado.

Es, por tanto, una de las primeras empresas que ofrece la posibilidad a sus clientes con grandes fortunas en criptomonedas poder comprarse con ello una vivienda.

Las tasas de intereses que están ofreciendo ahora mismo son de entre el 5 y el 7% y si miramos en su página web, en caso de que estemos interesados en una vivienda de un millón de dólares, Milo ofrece a sus clientes una hipoteca a 30 años con un interés del 5,95%.

El truco está en que los inversores deben tener el 100% del importe que se necesita en criptomonedas y el plazo de estas hipotecas se puede cerrar en apenas tres semanas pagando el importe íntegro y sin un pago inicial extra.

Se trata de inversores que quieren invertir su fortuna virtual en bienes físicos de ahí que desde Milo sean tan exigentes. Aquellos que soliciten una vivienda de, por ejemplo, un millón de dólares, deben tener esa cantidad en fondos de criptomonedas. 

La idea es que "el comprador no venda sus criptomonedas y luego vea como va subiendo su valor", explican desde Milo, sino que de lo que se trata es que la organización sea toda en moneda virtual y que no sea necesario ningún tipo de cambio.
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